Sol, playa y buena gastronomía son tres buenos motivos para mudarse a Portugal. Sin embargo, antes de poder disfrutar de la dolce vita, hay que afrontar el proceso de mudanza.
Con varios tipos de permisos de residencia disponibles, mudarse a Portugal nunca ha sido tan sencillo. Sin embargo, existen varios peligros que hay que tener en cuenta y obstáculos que hay que evitar. Aquí es donde la experiencia de un socio local como NEWCO resulta vital.
Al mudarse a Portugal debe conocer bien todos los pasos necesarios, los documentos que debe recabar y los trámites que debe realizar. Una buena preparación previa es garantía del éxito de su mudanza.
Los ciudadanos de la Unión Europea (UE), de países equiparados (Noruega, Islandia, Liechtenstein y Suiza), así como sus familiares, pueden mudarse a Portugal y establecer aquí su residencia por un período superior a tres meses, y ejercer su derecho a la libre circulación, siempre que realicen una actividad en Portugal (asalariada o no) o dispongan de recursos suficientes para ellos y para los miembros de su familia.
Mudarse a Portugal como ciudadano de un tercer país o como familiar de un ciudadano de un tercer país implica trámites adicionales en comparación con los ciudadanos de la Unión Europea (UE), debido a las diferencias en la legislación sobre inmigración.
Portugal ha mostrado un creciente interés por atraer nuevos residentes, tanto para impulsar la economía como para enriquecer el tejido social del país.
Como parte de este esfuerzo, se han creado varios permisos de residencia para adaptarse a diferentes necesidades y circunstancias.
En un plazo máximo de tres meses desde su llegada a Portugal, los ciudadanos de la UE deberán acudir al ayuntamiento de su zona de residencia para registrarse y obtener su “certificado de registro de ciudadano de la UE”. Los familiares que no sean ciudadanos de un Estado miembro de la UE deben informar a la AIMA (Agencia para la Integración, Migraciones y Asilo) de que tienen intención de vivir en Portugal y solicitar su "tarjeta de residencia" en este país.
Por su parte, los ciudadanos de terceros países y sus familiares deben solicitar un visado adecuado al propósito de su estancia antes de poder viajar a Portugal y obtener aquí su permiso de residencia.
El visado de residencia debe solicitarse en el consulado o embajada portuguesa en el país de origen y, una vez aprobado, tiene una validez de cuatro meses y permite entrar dos veces a Portugal.
Este proceso incluye la presentación de documentos como pasaporte, justificante de alojamiento, medios de subsistencia, seguro médico y, según el caso, contrato de trabajo, de servicios o de sociedad, justificante de ingresos pasivos, de vínculos familiares u otros, en función del propósito de la residencia en Portugal.
Después de llegar a Portugal con el visado adecuado, es necesario obtener un permiso de residencia en la AIMA. Estos permisos tienen una validez inicial de dos años, renovables por períodos iguales de tres años. Pasados cinco años, es posible obtener un permiso de residencia permanente o el estatus de residente de larga duración en la UE.
A la hora de mudarse a Portugal, hay que tener en cuenta varias cosas. Algunas son obligatorias, como obtener un número de identificación fiscal (NIF) o encontrar alojamiento, y otras dependen de su situación personal y profesional concreta.
Obtener un Número de Identificación Fiscal (NIF) es un paso crucial al mudarse a Portugal.
Necesitará un NIF para casi todo, como comprar un inmueble, contratar servicios públicos, iniciar una actividad o firmar un contrato de trabajo, por ejemplo.
Al mudarse a Portugal, abrir una cuenta bancaria en un banco portugués es fundamental para comprar una casa, pagar sus facturas e, incluso, para recibir su salario, si trabaja en Portugal.
Si quiere mudarse a Portugal tendrá que buscar un lugar donde vivir.
El mercado inmobiliario en Portugal es dinámico y diverso, y varía considerablemente entre las distintas regiones del país. En las principales ciudades, como Lisboa y Oporto, la demanda de vivienda es elevada, lo que se traduce en precios más altos, especialmente en las zonas urbanas céntricas.
Por otro lado, en las regiones más rurales o del interior, los precios tienden a ser más asequibles, lo que ofrece una oportunidad para quienes buscan un estilo de vida más tranquilo y unos costes de vida más bajos.
Registrarse en la Seguridad Social portuguesa y obtener un número de usuario son pasos fundamentales para los expatriados en Portugal, ya que garantizan el acceso a una serie de servicios y beneficios sociales cruciales.
Para quienes trabajan y cotizan a la Seguridad Social, este registro no solo facilita el acceso a derechos como pensiones, prestaciones por desempleo y enfermedad, sino que también vincula al individuo a un sistema de apoyo que promueve la inclusión social y la protección en momentos de necesidad.
Por otro lado, los expatriados jubilados que nunca han cotizado a la Seguridad Social portuguesa se enfrentan a un escenario diferente. Aunque pueden tener derecho a servicios sanitarios a través de su número de usuario, su derecho a otras prestaciones sociales puede verse limitado y depender de los acuerdos bilaterales entre Portugal y el país de origen, o de la necesidad de hacer aportaciones voluntarias.
Por tanto, es fundamental que todos los expatriados comprendan sus obligaciones y derechos dentro de este sistema, para garantizar que su estancia en Portugal se desarrolle de forma segura.
NEWCO garantiza el registro y el cumplimiento de las obligaciones de cotización en Portugal.
En Portugal, las normas relativas a los permisos de conducir varían según el país de expedición. Los titulares de permisos de la UE/Espacio Económico Europeo pueden utilizarlos hasta que caduquen y tienen la opción de canjearlos sin exámenes, pero deben proceder a su registro en un plazo de 60 días a partir de que establezcan su residencia.
Por otro lado, los titulares de permisos de conducir expedidos por los países de la OCDE y la CPLP (Comunidad de Países de Lengua Portuguesa) pueden conducir en Portugal siempre que cumplan ciertos requisitos, como la validez del documento y la edad mínima.
Los países con acuerdos bilaterales o de reciprocidad permiten el canje en determinadas condiciones, mientras que en las naciones que no están adheridas a convenios internacionales se exige superar pruebas teóricas y prácticas.
Cuente con el equipo de NEWCO para comprender sus obligaciones y trámites específicos.
Obligaciones fiscales ¡Dos simples palabras que nos pueden provocar inquietud! Como en el resto de los países, al mudarse a Portugal debe tener en cuenta el tipo de impuestos que va a pagar y cuáles son sus obligaciones fiscales y declarativas.
Afortunadamente, cuenta con un socio local con más de 30 años de experiencia como NEWCO para ayudarle.