5 temas fiscales que marcarán el final de 2024

Con el verano llegando a su fin, nos acercamos al momento crítico de la toma de decisiones: son inminentes una serie de propuestas legislativas y reglamentarias largamente esperadas.

El debate público girará una vez más en torno a la toma de decisiones a largo plazo sobre cómo quiere posicionarse Portugal en una época en la que las ventajas fiscales siguen siendo clave para atraer inversores, pero en la que no pueden pasarse por alto la equidad y la igualdad de condiciones en la fiscalidad internacional.

Analicemos algunas de ellas:

1. Presupuesto del Estado para 2025

Los Presupuestos Generales del Estado portugueses son un documento fundamental que refleja las prioridades económicas y sociales del Gobierno y establece el marco de la política presupuestaria, el gasto público y la fiscalidad. La propuesta se presenta al Parlamento antes del 15 de octubre de cada año y va seguida de un debate en el que son posibles (e incluso esperadas) las enmiendas. Una vez aprobadas (y si se aprueban), las disposiciones se aplicarán a partir del 1 de enero de 2025.

A lo largo de los años, los Presupuestos Generales del Estado se han convertido en la principal fuente de los sucesivos cambios fiscales (lo cual es una opción discutible), reservando los Gobiernos sus principales propuestas para este momento, en el que la opinión pública está fuertemente dominada por intensos debates que duran más de un mes.

Los Presupuestos de 2025 tienen un punto de interés adicional: serán los primeros del nuevo Gobierno de minoría de derechas elegido en las elecciones anticipadas de marzo de 2024. Dada la necesidad de una mayoría para que el documento sea aprobado (lo que significa que serán necesarios acuerdos/concesiones), se avecinan retos considerables. Seguiremos de cerca este proceso y le mantendremos informado.

2. Reglamento RNH 2.0

Este tema se está convirtiendo en un clásico de nuestros boletines informativos, pero lo cierto es que resulta sorprendente que, casi nueve meses después del inicio del régimen, aún no dispongamos de una normativa que será esencial para las perspectivas a largo plazo del régimen NHR 2.0.

Sin embargo, el retraso tiene una buena noticia: como hemos mencionado antes, el nuevo Gobierno nacional ha anunciado planes para ampliar el ámbito reducido de elegibilidad que estableció el Gobierno anterior. Así que esperamos noticias a finales de septiembre o en octubre, un aspecto clave de las cuales es que los reglamentos serán establecidos directamente por el gobierno y no requerirán un largo proceso de aprobación parlamentaria.

Un proceso aparte es la regulación del NHR 2.0 en Madeira. Se trata de una prerrogativa del Gobierno Regional de Madeira y es probable que se utilice durante la aprobación del Presupuesto Regional de 2025, un documento completamente independiente del presupuesto nacional.

3. Reducción de los tipos normales del impuesto de sociedades

El nuevo Gobierno nacional ha anunciado su intención de reducir progresivamente el tipo normal del impuesto de sociedades hasta 2027.

El primer cambio debería introducirse en 2025 (potencialmente en los Presupuestos Generales del Estado, pero también podría ser una iniciativa autonómica), con una reducción del tipo general al 19 por ciento. Al mismo tiempo, se aplicaría un nuevo tipo del 12,5 por ciento a los primeros 50.000 euros de base imponible.

Si se confirman estos cambios, Madeira y las Azores podrían reducir constitucionalmente el tipo normal del impuesto de sociedades al 13,3% y al 8,75% para los primeros 50.000 euros de renta imponible. Por el momento, todo esto no es más que una ilusión, pero no deja de ser una buena perspectiva.

4. Cambios en el régimen de exención por participación

El régimen portugués de exención de la participación prevé la desgravación fiscal de determinados tipos de ingresos, a saber, los dividendos y las plusvalías, procedentes de participaciones cualificadas en otras empresas. En virtud del régimen actual, los dividendos y las plusvalías admisibles están exentos del IRC, siempre que cumplan criterios específicos, como un periodo mínimo de participación (1 año) y un porcentaje de participación (10%).

El Gobierno ha anunciado planes para reducir el porcentaje mínimo de propiedad al 5%. Este cambio sería sin duda bienvenido y constituiría una vuelta al régimen introducido inicialmente en la reforma del IRC de 2014.

5. Transposición de la Directiva del Pilar 2 a la legislación portuguesa

Los Estados miembros tenían hasta el 31 de diciembre de 2023 para transponer la Directiva del Pilar 2 (formalmente conocida como Directiva (UE) 2022/2523 del Consejo) a la legislación nacional. La mayoría de los Estados miembros consiguieron hacerlo y las nuevas normas entraron en vigor el 1 de enero de 2024.

Sin embargo, Portugal incumplió el plazo y no fue hasta mediados de 2024 cuando la Secretaría de Estado de Asuntos Fiscales lanzó una consulta pública sobre un proyecto de ley para la aplicación del Pilar 2. A principios de septiembre, el Gobierno presentó un proyecto de ley al Parlamento, con la intención de finalizar el proceso de aprobación lo antes posible y evitar más complicaciones con la Comisión Europea. Una vez transpuesta, se espera que la ley entre en vigor ya en 2024.

Al mismo tiempo, cabe mencionar que la adopción por Portugal de la Directiva del Pilar 2 está naturalmente en consonancia con las políticas fiscales de la UE y las normas mundiales, estableciendo un tipo impositivo mínimo global del 15% para las grandes empresas multinacionales con ingresos anuales superiores a 750 millones de euros.

Según cifras oficiales facilitadas por el Gobierno portugués, en Portugal operan unas 3.000 empresas cubiertas por la Directiva del Pilar 2.

Consideraciones finales

Estamos en una época en la que la fiscalidad tiene una influencia transversal en la percepción y la confianza de toda la población.

Por eso, en un país en el que el debate sobre la presión fiscal y el gasto público está siempre presente, los partidos políticos son especialmente activos y tratan de destacar sus puntos de vista y propuestas fiscales.

Esta prioridad es particularmente delicada dado el escenario actual en el parlamento portugués, que requiere negociaciones entre todos los partidos para que se aprueben las leyes. Por ello, algunas de las medidas enumeradas deben considerarse con cierta cautela por el momento, mientras que otras que son simples reglamentos de leyes existentes (como el RNH 2.0) están más cerca de su aplicación efectiva.

Si tiene alguna pregunta sobre lo anterior o cualquier otra parte del proceso legislativo portugués y las iniciativas actuales o futuras, no dude en ponerse en contacto con uno de nuestros expertos.